Introducción.
Podríamos dar la justificación a nuestro punto de
atención considerando que como la Economía no se encuentra otra disciplina
conllevada por sofistas a relación con el hombre. Las falacias en torno a la
economía, son diferentes y múltiples desde la ganancia fácil de riqueza, hasta
la creencia de que las maquinas generan el desempleo de los hombres, dan las pautas de análisis a dicha relación.
Este sofismo de análisis tan antiguo y ha sentido a
la historia con incluso revoluciones inmensas con una lucha fundamentada en un
error.
Historia del sofismo de las máquinas y el hombre.
Si regresamos a lo
expuesto por Adam Smith desde 1776, su análisis a relación de la división del
trabajo Smith genera la explicación de cómo el por relación a producción y
capacidad de generación en un 99.98% la maquina superaría al hombre, desde
estos puntos inicia dicho sofismo. La historia conlleva la lucha y persecución
donde los ejemplos abundan, como por citar fechas importantes a mención la
revolución industrial, a dicha lucha incluso conllevo persecución de todos
aquellos inventores o creados de la propia tecnología.1
Pero la historia denota
un error, en dicho sofismo por ejemplo en 1760 Arkwright demostró como en la
industria textil, con el uso de la maquinaria se incrementó no solo la
producción sino incluso número de empleados casi un 300%, en cada investigación
en dicho sentido de manera parlamentaria se observó, como la industria en su
uso a la tecnología conllevo mayor fuentes de empleo.2
La Historia y las crisis
siempre van de la mano, las respuestas a la misma son vagas y de moda. Ejemplos
a sentido parlamentario podremos citar fechas en demasía, por ejemplo en 1932 cuando se presentó una depresión económica
importante y nuevamente la culpa fueron las máquinas y los tecnócratas
revivieron dicho sofismo, y la respuesta
fue la misma, el sector publico tomo como verdad lo antes expuesto.
Justificación de un sofismo equivoco.
Montañas inmensas en
errores al tema, del sofismo erróneo de que las maquinas suplen al hombre
sobran, la historia arroja día a día puntos a justificación, mas dicha
justificación no es válido si no se tiene una base bien fundamentada, lo no escrito
no es conllevado a los hechos. Es tal el miedo a las máquinas que incluso
autores como Roosevelt 1945 refiere “Hemos llegado ya a un extremo en que los
mecanismos economizadores de trabajo sólo son deseables cuando no se desplazan
al obrero de su puesto”.3
Cargar o transportar.
Podríamos preguntarnos la
simple deducción, de por qué transportar por vía aérea o marítima materiales de
construcción cuando se puede simplemente contratar un millón de cargadores,
hacer una fila humana y con ello cargar dichos materiales, si la lógica de los
tecnófobos radica en este principio, dicho principio rompe la razón misma de lo
ilógico. Pero a pesar de esto dichas teorías causan un retroceso sin validación
ni sentido, aunque dichas teorías se mantengan o se relacionen con modas sociales.
Pero podríamos continuar
defendiendo trasportar que cargar, y esto es ha sentido de tres puntos clave en
la economía de avance (tecnológico):
- Fenómeno de
ampliación y producción directa
- Reinversión en base
de la producción
- Incremento del
propio consumo
Todo lo anterior
conllevara un incremento directo en demanda de trabajo. Es decir el dinero
fluye de manera indirecta.1
Competencia y producción.
En los fenómenos de la
industria el sentido de producción genera de manera directa o respuesta
consecuente una competencia directamente proporcional, esto genera igualdad en
precios, ofertas de recursos y apertura de mercado.
Las aperturas de mercado
no serán directamente al producto que se produce sino más bien serán en base a
los efectos secundarios de dicha producción, el ciclo de mercado será el que
genere la estabilidad de la cual tantos
tecnófobos temen, o incluso buscan delimitar su crecimiento.
Pero en dicho contesto
las maquinas no solo con creadas para generar empleos, sino más bien para
incremento de la calidad global de vida,
llámese producción, accesos, vialidades e incluso el propio nivel de vida.

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El no tomar esto en
cuenta nos puede llevar a estar en sistemas absurdos y reaccionarios, al no
dejar avanzar la tecnología a la par con el hombre.
Las maquinas Deseantes
Al final, podríamos
connotar la relación de lo que menciona Deleuze, donde todo lo que es
fabricado, la lucha entre las máquinas y el hombre están en un flujo el cual
no, es más que el flujo del deseo de la sociedad. En otras palabras el modo de
producción capitalista es una forma de organización de la producción deseante,
que busca lograr que las maquinas Deseantes deseen lo que le conviene al
sistema.
Esto conlleva a que las maquinas respondan a la económica
consumista, o en el otro tenor los tecnófobos responden a proteger los puestos
laborales, variantes rizomicas que se deben analizar para tener una lógica
aplicable y un punto no vago al deseo si no a la vida misma.4
El Dominio
interno de las Maquinas.
Hace tiempo leí un artículo en el Journal de Economía
referente al avance de la tecnología en sentido
del equilibrio financiero en relación a la bolsa de valores, en donde se
denotaba que un 66% se realizaba en torno a las maquinas en base a logaritmos
matemáticos y sistemas de cálculo directo, la bolsa de valores se ha
transformado poco a poco e incluso se conlleva que en un futuro un 99% de
dichas transacciones, esto es un factor de análisis.
Erick Brynjolssfon clasifican en la historia del hombre el
dominio de las maquinas en dos etapas, la Era de la Maquina, que surgió con la
primera y genuina Revolución Industrial y la Segunda Era de la Máquina. La primera
dio lugar a un espectacular crecimiento de la población mundial y de su nivel
de vida, y ha durado casi dos siglos y
medio. La segunda es en la que estamos entrando en la actualidad y está basada
en las tecnologías digitales y exponenciales.5
En ambas etapas dicho actor divide y
caracteriza cada etapa la primera va en sentido de la capacidad muscular y
física en general del hombre y la transformación de la naturaleza del mundo en
el que habita, y a la segunda, la multiplicación de la capacidad cerebral y
mental del ser humano.
Primero se creó una máquina de vapor
para suplementar actividad física del hombre, hoy se crea una computadora para
suplementar el cerebro, los avances de la tecnología.
Ian Morris incluso establece incluso una tercera etapa en donde la ficción
en la relación con las máquinas y es cuando nos preguntamos en donde se
establece el equilibrio de dicho crecimiento y balance en la economía.6
Las preguntas pueden surgir en
sentido así se respetara dicho equilibrio entre hombre, máquina y economía, a
dicho balance debe de mantenerse el equilibrio y fundamento de estabilidad
porque si se llega a perder lo anterior se pierde la ventaja que anteriormente
hablamos con relación al beneficio de las máquinas.
Conclusión.
Nos podríamos preguntar en dicho
sofismo entre las máquinas, el hombre y la propia economía, pero tan fácil como
regresar a la definición de maquina la cual explica parte del contexto y
entendimiento de la idea a dicho sofismo, diciendo entonces que maquina es todo
invento creado por el hombre para auxilio de su trabajo.
No podremos pasar por alto que las
facultades productivas entre el hombre y las máquinas, mientras las del hombre
se dilatan a medida que la de las
maquinas se multiplican, por mencionar que las máquinas y su creación son para
ahorrar un esfuerzo al ser humano buscando entonces un producto que llega a la
sociedad elevando claro la dignidad
personal a un grado sin olvidar.
Las maquinas aceleran la producción y
hacen al hombre ser dueña de la mismas, en teoría esto facilitara el comercio,
extendería el consumo, satisfacen las necesidades (O los deseos) y deben de
buscar promover el bienestar universal, esta es la teoría básica y electiva en
torno a las máquinas, la mercadotecnia y el hombre; más sabemos que cuando un
punto que puede sonar perfecto puede ser desastroso cuando se trata del hombre
quien lo domina.
Producción de riqueza, satisfacción
de deseos, enriquecimiento son múltiples los puntos por los cuales las maquinas
se emplean pero, son múltiples los factores que se deben de cuidar para no
romper este equilibrio entre estas dos
partes.
En busca de capital o en busca de
factibilidad de producción las maquinas buscan dicho fundamento en la historia
y relación del hombre y es incluso este último que en la mayoría de las
ocasiones rompe esta permuta, no es el efecto de la maquina su perjuicio , es el efecto de quien la posee
podríamos concluir, la tecnología y la economía no están peleados, pero cuando
el hombre olvida el sentido de las cosas y los principios fundamentales en cada
relación sea económica y social , todo se pierde.
Musk uno de los creadores de Tesla,
Pay Pal y Space hacen una reflexión muy importante al señalar que la tecnología
puede ser invocar al demonio o tocar el cielo la diferencia está en su control
humano, con noción de beneficio social, el sofismo mercantil entre las máquinas
y los hombres existirá a la par de la historia de la humanidad, pero la
justificación del mismo está en la necesidad de la idiosincrancia al avance
tecnológico y el miedo a la conducta
humana, porque por proceso de comprobación científica la mercadotécnica no está
peleada con la tecnología, pero por usos de las mismas (maquinas) y costumbre
del humano la equidad no solo con las
maquinas ,si no en la vida en general , la humanidad con máquinas o sin ellas ,
sus deseos de tener , ciegan sus deseos de crecer.
Bibliografia.
1. Hazlitt, H.
(1996). En A. Rivero (Trad.). Economía en una lección (4 ed.). Madrid: Unión
Editorial S. A. (Trabajo original publicado en 1946).
2. Agustín Reyes
Ponce, Administración Moderna, México, Limusa p, 167
3.
Franklin D. Roosevelt, With a New Afterword, New York Oxford 1945
4. Botto, Michele e individuo
en el pensamiento de Gilles Deleuze, Universidad Autónoma de Madrid. Facultad
de Filosofía y Letras; Universidad Autónoma de Madrid. Departamento de Filosofía Fecha
de edición: 2011
5. The Second Machine Age: Work,
Progress and Prosperity in a Time of Brilliant Technologies (W. W. Norton &
Company, 2014
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